El comisario Rodolfo Alegre se refirió al suceso lamentable que significó la muerte de una persona en la zona de Arroyo Vega. El funcionario policial comentó que se tomó conocimiento cerca de las dos de la madrugada, en el domicilio de una familia de apellido Pérez.
El chofer de la ambulancia les informó que en este sitio, se encontraba aparentemente una persona en grave estado de salud. Al llegar al lugar, se encontraron con el deceso de un ciudadano de sexo masculino. En este marco, avisaron a la Policía de Corrientes, que constató la presencia del cadáver en una cama.
El mismo fue identificado como Tomás Pérez, de 56 años de edad, domiciliado en localidad de Esquina. El mismo se desempeñaba como cuidador de una de las cabañas de la localidad. A simple vista pudieron constatar la presencia de “un hilo de sangre en la frente”, por lo que se procedió a la demora de las personas que se hallaban en la vivienda, es decir los hijos del fallecido.
Los mismos manifestaron a las fuerzas policiales que el fallecido se estuvo ingiriendo bebidas alcohólicas durante toda la jornada. Esto atentó contra su salud, ya que por prescripción médica no debía consumir bebidas de este tipo. En manifiesto estado de ebriedad, mantuvo una discusión con sus hijos, quienes para evitar una pelea, decidieron llevarlo a que tome reposo. En un determinado momento, se zafa, pierde el equilibrio y cae sobre una cocina y una garrafa.
Sigue cayendo y finalmente golpea contra un trozo de madera y se golpea el pecho. Allí, uno de sus hijos lo auxilió, luego de lo cual manifestó algunas palabras y falleció en el lugar. Al llegar la ambulancia, el hombre estaba muerto, por lo que se detuvo a los dos hijos y se caratuló la causa en principio como muerte dudosa, en virtud de la decisión del fiscal.