Otra locura de Silva. El sorprendente hecho se produjo a los siete minutos del complemento, cuando el ‘Granate’ y Quilmes aún igualaban sin goles. Su compañero Jorge Pereyra Díaz se perdió un gol increíble, mientras el uruguayo esperaba el pase en soledad para empujar el balón. Ante esto, el ‘Tanque’ enfureció y se desentendió por completo del ataque que casi termina en el 1-0 a favor.
En el cierre de la octava jornada del Torneo Final se enfrentaban dos elencos que buscaban recuperarse y animaban un urgido clásico zonal: Lanús y Quilmes. Y aunque uno llegaba mucho más complicado que el otro (el ‘Cervecero’ lo hacía sumergido en zona de descenso), a ambos les costaba poder sacarse diferencias. A tal punto que se fueron al descanso sin poder abrir el marcador.
Lo insólito sucedió a los siete minutos cuando atacaba el ‘Granate’. Jorge Pereyra Díaz quedó ante una inmejorable ocasión de poner en ventaja a su equipo, mientras Santiago Silva esperaba solo a un lado recibir el balón para empujarlo al fondo de la red. Sin embargo, el ex Ferro optó por la individual y no logró su cometido de festejar.
Ante esto, el ‘Tanque’ no pudo ocultar el malestar que le generó el proceder de su compañero y, caprichosamente, se quejó y se desentendió por completo de la jugada cuando la pelota aún continuaba en poder de su equipo. De hecho, luego el riojano le pasó por al lado y sacó un remate al arco que el uruguayo ni siquiera miró.